Definido por la RAE:
euforia.
(Del gr. εὐφορία, fuerza para llevar o soportar).
1. f. Capacidad para soportar el dolor y las adversidades.
2. f.
Sensación de bienestar, resultado de una perfecta salud o de la administración
de medicamentos o drogas.
3. f. Estado de ánimo propenso al optimismo.
Desde hace varias semanas vivo en un estado de euforia constante, si me permiten aclararlo: ¡No!, no estoy ingiriendo drogas.
Sumado a mis ataques de euforia, "quienes" generalmente me atacan por las noches causandome insomnio con frecuencia, existe el hecho del: "Hay alguien que me gusta".
Como muchos ya saben la verdad es que esta vez no tengo la más mínima idea si yo le gusto o si he llamado su atención más allá del: una amiga más, lo único que sé es que él me cae muy bien y viceversa.
El delineante (ya saben que a Romina le da por nombrar a los hombres importantes en su vida por sus profesiones) tiene algo especial. Debo admitir que no hay mariposas en el estómago a excepción de aquel día que parado junto a mi pasó suavemente su dedo por mi brazo, sí, delineandolo, desde el codo hasta mi mano.
No puedo decir que aspiro a ser algo más que su amiga, cosa que me encantaría pero no puedo afirmarlo hasta el momento, ni dar por hecho algo que ni yo misma se si algún día pasará, es simplemente el que más allá de gustarme y atraerme fisicamente con ese look típico hippioson de los que me conocen, es la primera vez que también que me siento atraída por una lonchera, ¡ups! ya lo dije, sobra decir que es solo un año de diferencia, así que no se espanten.
Confieso que me siento bien cuando estoy cerca de él y gozamos de temas tan rídiculos que van desde un chiste local hasta la complejidad de sus halagos o del cómo se dice/escribe alguna cosa en particular, incluso en los debrayes históricos el hilo se sigue perfectamente. Es eso lo que admiro en el delineante su capacidad empática.
Así, justamente así es como quiero sentirme por el resto de mis días y no hablo de que si no es con él no lo estaré porque finalmente eso no depende de las personas a tu alrededor, depende de uno mismo cuando simplemente dejamos que algo o alguien provoque tanto dentro de nosotros que logre desencadenar periodos de euforia intermitentes permitiendonos seguir respirando.
Mientras tanto seguiré disfrutando de mis días, mis noches y periodos de euforia, agradeciendole al delineante el haber desencadenado la inspiración para continuar con "Romina", recordándolo parado junto a mi buscandome la cara y sonreír.