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Friday, December 23, 2011

Conejo #260811



Era de noche, me pediste un conejo. No quise dártelo aunque guardé en secreto que ya había llegado desde noviembre. Cuando me lo pediste, sentí que me lo estaban quitando. Lo escondí debajo de las cobijas para que no pudieras verlo. Creo que aún no estás listo para hacerte cargo de él. Llevo cuidándolo unos cuantos días. Desde que llegó tomó posesión de una de mis botas, lo dejé quedarse ahí aunque eso significara no usarlas más.

Pantufla aún es pequeño, gris y con un manchón negro en su pata delantera derecha, medirá apenas unos diez centímetros. Sé que le puse nombre, no debí haberlo hecho, porque hacerlo es encariñarme con él. La verdad es que no quise dártelo cuando lo pediste, ¿sabes? es un conejo un tanto pretencioso, intenso y de vez en cuando un poco tímido. Imaginarás la combinación. A pesar de ser muy inquieto –brinca todo el día-hablo con él y le explico que debo ir a trabajar y que llegaré pronto. Cuando no puedo llegar temprano se pone triste, me ignora y no quiere salir de su bota. La primera vez que se escondió estaba preocupada, pasaron dos días y apenas asomó las orejas, era obvio no quería que lo volviera a ilusionar. Necesita cuidados sabes, no estás preparado para él.

Preparé un poco de té de frutos rojos con miel y me senté en el piso cerca de la bota, tomé la taza con mis manos para calentarlas un poco antes de tomar al pequeño Pantufla. No debes preocuparte es dócil, solo no hay que hacerlo enojar o saldrá corriendo y no querrá saber más de ti, -es muy intenso en eso se parece a ti-. Apagué las luces y estuve ahí mirándolo un par de horas. Entendí que era tiempo de dejarlo ir, no podía seguir encariñándome con algo que no era mío, tuvimos una larga plática, me llevó toda una noche poder plantear las cosas que quería que te dijera lo más claro posible.

“Es un hecho que me dio gusto conocerlo Pantufla. ¿Sabes? fue en un viaje a Campeche en agosto. Confieso el “tipo” se me hacía algo pesado, de hecho casi invisible. Basto un momento para sentir la necesidad de conocerlo, pero yo en ese momento tenía otros problemas en cuáles enfocarme para no hundirme. Recuerdo que me pidió información turística de Berlín. ¿Berlín? cómo decirle que Alemania no era un tema seguro en ese momento, fue como meter el dedo en la llaga Pantufla, pero fui fuerte y le dije que se la enviaría, me dio sus datos y nos despedimos. No supe más de él”

“Unos cuantos meses después, me preparaba para un viaje a Orlando, llegué muy temprano al aeropuerto, fue de esas pocas veces en las que un viaje de trabajo me emocionaba. Me acerqué a las pantallas y en el “check-in” vi su nombre al lado del mío <<¡Voy a viajar con este pesado!>> dije. Lo busqué en la sala de espera, lo busqué en el avión y no lo encontré. Lo olvidé un poco durante el vuelo, bajé y ahí estaba. La verdad no sabía si saludarlo o no, pero no me quedaba otra alternativa.”

Pantufla me miraba con extrañeza. Entendiendo y procesando tantas incongruencias. Seguí.

-Traté de no darle mucha importancia. No quería dársela. Pero me conoces, sabes que más tardo en oponerme que en hacerle caso a mis impulsos. Convivimos mucho tiempo durante el viaje y cambió mi perspectiva, ya no era aquél que me caía tan mal. Los días pasaron muy rápido y cuándo menos me di cuenta estábamos de vuelta. Como me ha pasado en algunos otros viajes, pierdes comunicación con la gente con la que te la pasaste tan bien y hasta que te los vuelves a encontrar se crea el lazo otra vez y no sé, simplemente no sé, si hubiera preferido que esta vez con él fuera así.

Entonces Pantufla me miró intrigado, era como si tratara de penetrar con su mirada mi retina para encontrar la terminación nerviosa que lo llevaría directamente a lo que quería decirle. Le di un gran sorbo a la taza y evite la mirada del pequeño conejo, recargué mi espalda al pie de la cama, suspiré y me armé de valor.

-¡No sé cómo decirte esto!, lo más preocupante es que no sé cómo se lo vas a decir, debes de buscar la manera más eficaz para que nadie salga lastimado. La culpa la tuve yo, pero también la tuvo él no debería mostrar tanto interés. Sí, es cómo pedirle que no haga lo que más me gusta que haga, -es como pedirle dejar de ser él-. Dentro de mi vulnerabilidad me he ilusionado, reído, llorado, enojado pero sobre todo me resistí a abrir la caja fuerte. La verdad es que no pude. Lo intenté y no pude. -Tomé al pequeño conejo, acerqué su oreja a mi boca y susurre: Me gusta.

Pantufla me miró como si supiera previamente lo que le diría. Para mí no había marcha atrás. Se lo había dicho y tendría que decírtelo a ti.

Me disgusta que las cosas no se estén dando como quisiera. Las semanas volaron, el año se acabó y lo he visto dos veces después de aquél viaje. Y aunque hemos seguido en contacto, chateando y hablando no está tan padre que comience a extrañarlo. Quisiera estar más con él.

Debes decirle que tiene que alejarse, que debe moderar más sus palabras, él no sabe lo impulsiva y lo creída que soy. No debe decir cosas como “ya dimos un paso más en nuestra relación” o hablar de “relación” por x, y o z. Porque no la hay. Al menos eso creo, aunque no es lo que quisiera creer.

Cierto es que… ¡no quiero perderlo Pantufla!, en poco tiempo lo he llegado a querer mucho. Pero no quiero pensar en él solo como una pantalla, como palabras que nunca se pronunciaron y de los planes que nunca se realizaron. Él sabrá qué hacer.

Pantufla, dile que lo quiero y que me retiraré unos días trataré de distraerme con más salidas y más personas. Dile que ahora entiendo porque desde Campeche me llamó la atención y porque desde Orlando no hemos dejado de hablar y aunque aún no sé el propósito por algo teníamos que encontrarnos.



Regresando a ti, creo que tocan a tu puerta. Abre, es el conejo que hoy te doy.

Wednesday, November 30, 2011

Diciembre... Beware


El reloj marca las 00:00 ha llegado diciembre...

siento la garganta un tanto rara... se está preparando.

He hecho algunas modificaciones a mi clóset, para poder alojarlos a todos..

Es diciembre, comienza mi bulimia de depuración personal...

Es diciembre y comienzo a vomitar conejitos.

Tuesday, November 22, 2011

Terror en el Seguro Social

Llámenme junior, fresa, hija de papi, como gusten... pero la verdad es que nunca había podido comprobar las historias de terror que escuchaba del IMSS nuestra "salva sea la institución" Instituto Mexicano del Seguro Social, hasta el día de hoy.

Llevo dos semanas con una Lumbociatalgia Sitematizada, lo que quiere decir que me eché los discos L4 y L5 de la columna, además de tener un desplazamiento de raíz nerviosa. Finalmente debí acudir a la "Institución" para tramitar mi incapacidad laboral. ¡Dios! ha sido toda una odisea primero porque casi sin poder caminar tuve que asistir el martes siguiente al salir del hospital a darme de alta.

La macabra aventura inicia desde que entras a la clínica con un color verde horrible que te hace sentir enfermo desde el mismo momento en el que cruzas la puerta, después, peregrinar para saber qué debes hacer y en cuál de las miles de filas debes formarte para realizar tu trámite. En fin, gracias a las instrucciones del policía me dirigí lenta pero segura hacia la ventanilla número uno para proceder con mi alta. -Vengo a tramitar mi alta- dije, a lo que la señora que se encontraba detrás de la ventanilla, rezó algo que no pude entender. Le pedí que me lo repitiera porque no la había escuchado bien y por segunda vez me quedé sin entender... total, no perdí tiempo en preguntar por tercera ocasión qué papeles necesitaba darle y sin pensarlo le di el bonche de papeles -qué casi incluían la cartilla de vacunación de Mina, mi perra- Durante el trámite no observé jamás un esbozo de sonrisa, nada, siempre serios, muy en su papel.

La señora me aventó la hoja y me dijo le toca el consultorio 5 vespertino y sin dudarlo me dirigí hacia el lugar. Una mesa vieja y una señorita con bata verde me indicó que debería asistir a consulta hasta el martes siguiente ya que se acabara mi incapacidad. Como no aguantaba la espalda, por supuesto asentí y me fui.

Regresé el martes pasado a la Clínica 9 del IMSS desde las 10 de la mañana para asegurar mi lugar ya que entraría a la cita por modalidad "ficha" (ni que fuera salchichoneria.. se pasan) en fin.. ahí estuve aplastada 4 horas hasta que me llamaron, pasé y la pseudodoctora sin siquiera haber dicho buenos días me comenzó a cuestionar cuando yo aún no había cerrado la puerta y no había llegado a la silla del consultorio.

Me paró, me examinó, me MAYUGÓ y me lastimó más de lo que ya estaba, me dijo.. no pues te voy a dar solo 6 días de incapacidad a partir de hoy y yo.. quéeee?? y los demás?? PUES ES QUE ES LÓGICO -respondió con voz altanera- subí el tono de la voz y le dije -ES LÓGICO QUE?- pues que tenías que haber venido antes -¿CÓMO VENÍA SI NO PODÍA CAMINAR? ¿ES LÓGICO QUE NO IBA A VENIR VÍA CONTROL REMOTO VERDAD?, creo que la mujer entendió mi punto y me mando a hacerme una "radiografía" y una valoración al hospital de traumatología ...hasta Villa Coapa -y miren que no soy doctora, pero hasta yo sé que en una radiografía no se ven ni las terminaciones nerviosas ni el daño que mis discos pueden tener- pero en fin.

Después de todo este show... al final me dieron una incapacidad por tan solo 6 días, adivinen qué? perdí más tiempo de lo que me van a dar, porque además como apenas acabo de ingresar a Nómina cosa que me tiene con los pelos de punta, resulta que como no he cotizado 4 semanas anteriores previos a mi alta, pues no me darán ni siquiera los 6 días completos... Cha-le... pero bien diría mi padre... qué necesidad tienes?

Pero bueno el punto aquí no es si yo tenga la necesidad o no, sino pensar en toda la gente que tiene que peregrinar en estos trámites burocráticos absurdos con gente a la que ni siquiera le gusta su chamba y que además son unos verdaderos carniceros con falta de ética total.

Y justo cuándo salí del hospital escuché en el auto un spot en la que una voz femenina narraba: "Hola!, soy enfermera del IMSS ¿Sábes qué es un tomógrafo?" hoy con risa malévola puedo responderle al spot... NI TÚ TAMPOCO! ¡Qué pena!

Tuesday, November 15, 2011

Lost Things

Les comparto este video que conocí gracias a mi amiga Karla Towers. Se ha convertido, desde ese entonces en uno de mis favoritos, al más puro estilo de My morning elegance...


Me pone a pensar si yo seré el objeto perdido de alguién...

falling.. we are always falling...


Para los lectores en facebook vean esta liga: http://www.youtube.com/watch?v=mwX7uEiEWx4

Un detalle

Un detalle que encontré en un baño del Museo de Ciencias en San Francisco California.



¿Quién podría imaginar que esta hermosa orquídea viva encerrada en un baño?

Suerte para aquellos que podemos notarla.

Sunday, November 13, 2011

Explosión de sentimientos

"En mi corazón vive una niña que siempre que tiene la sensación de que el mundo no funciona, se esconde en su rincón. En el rincón hay canciones que esperan a que ella las cante, acertijos que esperan a que ella los resuelva, recuerdos que esperan a que ella los evoque, sueños que, como la hojarasca, tiene que amontonar e ir examinando... Allí respira tranquila y camina despacio. El silencio entre notas da forma a la música, un silencio que transmite el mensaje de que existe un mundo nuevo y hermoso."
Jimmy Liao

Muchas personas luchamos inútilmente contra el tiempo por contener sentimientos, memorias y vivencias de antaño. ¿Para qué dejarlos fluir? –si los dejo ir, tal vez se vayan, no regresen y los olvide-. Y hablo de este tema porque me volví experta.

Conocí (y hablo de conocer musicalmente) hace poco más de dos años al grupo Beirut. Tomé su canción Elephant Gun como estandarte… “let the seasons begin” cantaba. Fui adquiriendo un gusto especial por su música, los grandes acordes de sus instrumentos de viento me relajaban. Y disfruté de Gulag Orkestar, de The Flying Club Cup, March of the Zapotec… y llegó él.

Coincidió ser una tarde complicada el día en que vi anunciado The Rip Tide, su nuevo álbum. Apliqué el “download” y lo guardé en mi soundtrack de la vida –mejor conocido como mi ipod morado- Ese día no sabía lo que me esperaba. Caminaba con la mirada perdida pero con paso firme sobre Reforma, era una tarde nublada, vería a MK en el hostal Catedral. Confieso que fue la caminata más larga y más pesada de mi vida. Triste porque se iría de la ciudad y con el miedo a ese sentimiento de pérdida me hice acompañar por Beirut tratando de encontrar en ella un pequeño refugio mental al cocktail de sentimientos que como arritmia estremecían cada segundo mi corazón.

Fue ahí, cuando Beirut cobró un nuevo significado.

La banda encabezada por Zachary Francis se presentó en México la semana pasada. Deseaba tanto verlos. El momento llegó y aún sintiéndome tan mal de la garganta emprendí el viaje. Llegué al lugar sintiéndome un tanto mareada y al momento de entrar e incorporarme con el grupo de gente que también iba a disfrutar del espectáculo, no podía respirar, las emociones estaban a punto de brotar, estaban a flor de piel y Michael estaba ahí, también...

Logré escuchar dos canciones de pie, cerca del escenario. Elephant Gun y me retiré. No pude más, tantas emociones contenidas durante tanto tiempo estaban gritando por salir. Triste, me senté en un rincón, en el rincón más frío y más obscuro del lugar. A mi alrededor unas 4 personas observaban al grupo con una mirada perdida, igual a la mía.

Absorta en recuerdos: “I like you because you are just here with me at the beach” “nothing is going to ruin us the night” “I still can feel the shape of your hand in my hand” “It was hard to sleep, wake up and leave Playa without you” “I was crying because I miss you so damn much”, entre memorias de mezcales y besos me fui adentrando.

Bajé al mismísimo infierno en el que he vivido por 3 meses desde que Michael se fue, arreglé un par de cosas, lo extrañé, lloré y me conecté con la parte más oscura de mi ser, traté de asesinar todos los recuerdos posibles para después darme cuenta que sería imposible forzar algo que tiene que ser natural. Beirut tiene eso, no importa que tan bien tengas guardada esa caja ni cuantos candados le hayas puesto. Sus acordes la impregnan y la abren de una manera muy sutil.

No puedo decir que salí con otra visión del mundo, ni que reencontré mi centro. Al contrario, fue tan solo una explosión de sentimientos que parece que desde ese día solo han causado un verdadero efecto dominó. Pero no podía vivir escondida, ni guardando tanto resentimiento, a pesar de que hoy seamos tan solo un vago y lejano recuerdo de aquella Sunday Smile.

Por si quieren saber de que les hablo.
The Rip Tide by Beirut.

Monday, October 31, 2011

Cerrando los ojos


"Como no sabías disimular me di cuenta en seguida de que para verte como yo quería era necesario empezar por cerrar los ojos."

Saturday, October 29, 2011

Delirios / Introducción. Capitulo 1


"Suele representar libertad, despojarse de ataduras del pasado. El loco te invita a despojarte de esas ataduras y te indica que tomes un nuevo camino por muy disparatado que sea.

Esta carta es la espontaniedad hecha realidad, es la carta que guía nuestro instinto. Aquello que nos dice que hagamos lo que el corazón nos dicte. Incluso si va en contra de lo socialmente establecido, sólo tú eres el poseedor de ese entusiasmo y esas ganas que te hacen ser felizmente ignorante de lo malo que te pueda pasar.

En cualquier caso, la actitud del loco suele desorientar bastante a las personas que están a su alrededor, ya que las cosas que hace no son comprendidas con facilidad, no es lo normal, no es lo socialmente establecido.

Si te sale esta carta cuando te tienes que enfrentar a alguna encrucijada en tu vida, el Loco te dice que creas en ti mismo y sigas los dictados de tu corazón, por muy disparatados que puedan parecer. Arriésgate a hacer esa locura que llevas persiguiendo hace tiempo"


Capítulo 1

Delirios

-“Me llevo tu sonrisa a la cama para soñarte despierta”- susurró aquella noche una dulce voz que me parecía haber escuchado antes por los pasillos de este pabellón. El reloj de pared marca la 1:15 de la madrugada de un caluroso 12 de marzo. A pesar de llevar varios días en coma, nada ha cambiado, el mismo azulejo desgastado, enfermos frente a mí -¿y, yo?- sentado en una cama vieja y corroída por el óxido como el que ahora me corroe la mente.

40º C. Decidí salir de la cama, me dolía la cabeza. Dejé ese amarillento y asfixiante cuarto, caminé entre una docena de insectos que salían de los lugares más lúgubres y oscuros muy seguros de que a esa hora su existencia en este mundo no peligraba. Exploré silencioso los pasillos.

El calor húmedo en esta temporada es sofocante, sobre todo en Bosch -el nombre de mi pabellón- no existe ventilación, no hay muchas ventanas ni puertas así que aprovechamos cualquier pequeño viento que se cuele entre el olor de medicamentos y sudores para respirar un poco de aire puro.

El dolor de cabeza continúa, me punza la sien.

Pierdo el conocimiento.

Friday, October 28, 2011

We have to move on now.

Mi corazón ha regresado de San Francisco y aunque anduvo un buen rato perdido acompañando a un hombre rubio de mochila roja, hoy está de vuelta.

A pesar de lo que sufrió en el camino hoy se encuentra recuperado; más grande, más rojo, más vibrante y radiante que nunca. Supo decir adiós y entendió que no puede borrar los recuerdos que dejaron una huella latente en él.

Sin embargo, We have to move on now because life goes on.

Es tan bueno despedirnos,
Como habernos conocido,
Es tan bueno aceptar,
La derrota como fue luchar,
Por lo que tuvimos tú y yo,
Y se acabó,
Por eso brindemos hoy.

Te pido no lo intentes más,
La puerta se ha cerrado,
Busca tu felicidad,
En otro lado,
Yo haré lo mismo y no te olvidaré,
Siempre serás,
Alguien que quise de verdad.



Tuesday, June 21, 2011

Hoy puedo ver a un muerto.


El paisaje era desolador. Un gran temblor había arrasado aquella ciudad colonial que días antes irradiaba vida y color. Sin embargo, no fue un movimiento de tierra común, era el estremecimiento que anticipaba la furia que pronto desataría el volcán más cercano.

Lo busqué desesperadamente.

Coincidimos, al fin, entre movimientos, derrumbes, escombros. Sostenía su mano fuertemente mientras el cielo se iba nublando. La ceniza que precedía al estallido se hizo presente en el ambiente. Caminamos colina abajo. Solo nuestros cuerpos cansados recorrían las calles empedradas. Miramos arriba y observamos los breves destellos naranjas que iluminaban el cielo. Era inminente; la erupción había comenzado.

La lava del volcán descendía por la colina arrasando los restos de las construcciones de aquella ciudad a su paso y con ellas también se fundían entre el calor memorias y recuerdos de una vida próspera. Escapamos entre las rocas y el panorama se tornaba macabro. Nos acercábamos a la lava pero no nos deteníamos era como si esa luz tan radiante nos llamara a conocerla de cerca.

Debíamos cruzar para salvarnos, debíamos cruzarla para estar en paz y continuar. Me ayudaste a cruzar, pero tú no lo hiciste. Me miraste con esos ojos color miel, tan melancólicos como tu vida. Alguien me jaló, no supe quién y ahí fue la primera vez que vi tu cara desvanecerse en la obscuridad.

Ella despertó un poco confundida y aturdida por las reminiscencias de ese lúgubre sueño. Abrió el clóset y eligió de entre toda su ropa de colores resplandecientes un pantalón y una playera de color negro. -“Parece que iré a un funeral” pensó al verse en el espejo.

Un mensaje a su celular llegó alrededor de medio día. “Anoche tomé algunas pastillas y no morí hoy. Ya sé la dosis”. Inmediatamente marcó su número, el teléfono sonó unas cuantas veces pero nadie contestó. Siguió intentando, su dedo apenas colgaba y nuevamente se escuchaba el redial. Se detuvo unos minutos y sentada, algo desorientada tan solo esperó.

La llamada llegó.

“No me siento bien. Perdóname. Te quiero mucho”, apenas susurró y colgó.

Ella entró en shock, no podía creer lo que había escuchado y volvió a marcar para rectificarlo. Unas 50 llamadas se hicieron a ese teléfono, al menos eso mostró el recibo telefónico meses después. Finalmente una mujer contestó el teléfono.

“El no puede contestarte, está muy mal”

Al oír estas palabras, su mundo se derrumbó y de rodillas llorando tomó las fuerzas necesarias para ponerse de pie y manejar hasta la casa de su novio.

Hasta ese momento no estaba segura de lo que había sucedido. Patrullas y ambulancias rodeaban la casa ubicada en la Avenida 3 y una decena de gente a las afueras esperaba que la policía diera su informe.

Pasaron algunos minutos y ella no bajaba del auto. Así vio salir una camilla. Intentó buscar algún rastro, alguna herida, una señal que le diera pie a tan solo imaginar qué había sucedido. No vio nada. El salió con vida, tranquilo, inmovilizado de la cabeza con su pijama y playera roja.

Prendió el auto y siguió a la ambulancia que lo llevaba. Paró en las puertas de un reconocido hospital. A los pocos minutos se estacionó y pudo bajar. Los mismos paramédicos que lo subieron a la ambulancia llevaban la misma camilla, ahora, vacía. Una mancha de sangre impregnada en la almohadilla le abrió la mente y lo supo. Supo que lo había perdido.



Recordé esta historia un día caminando a la salida del trabajo cuando cuatro camilleros transportaban un cuerpo sin vida desde la ambulancia hacia la morgue. Ese día dejé de ver a un “novio”. Hoy, solo puedo ver un muerto.

Esta es la historia de un sueño, un sueño macabro que al día siguiente se volvió realidad. Una historia verdadera; mi historia. El capítulo que cambió mi vida, el que me marcó, el que explica todo lo que soy ahora.

Thursday, June 9, 2011

Mensaje

Cuando te dejan mensajes como este:

"De verás que verte a ti, me hace sentir grande por tu energía. Sigue así"

Entonces todo, TODO, ha valido la pena.




Another rose wilts in East Harlem
And uptown downtown a thousand miles between us
She's waiting for the night to fall
Let it fall, I'll never make it in time (repeat 3x)

Sound is the colour I know, oh,
Sound is what keeps me looking for your eyes,
And sound of your breath in the cold,
And oh, the sound will bring me home again.(repeat 2x)

Tuesday, May 24, 2011

La verdad sobre mis 60 kilos

El día de hoy realicé mi última visita al doctor en esta horrible semana. Me pesó, la bascula marcó 60 kilos. La realidad es que he dejado de cargar un gran sobrepeso a lo que nombre “mi otra yo” he perdido 58 kilos en un periodo de cinco años gracias a una operación de banda gástrica. ¿Magia?... No, el camino no ha sido fácil, he sufrido, me he frustrado, me he sentido muy mal, he tenido los ojos enmarcados con unas grandes y negras ojeras… pero también he tenido plena satisfacción al ver como mi cuerpo se aligeraba y ropa que antes no podía usar ahora me quedaba perfecta.

¿Cómo decidí ponerme una banda gástrica?
Siempre he sufrido de problemas estomacales debido a mi lento metabolismo, un día acompañé a mi madre con su gastroenterólogo para darle un tratamiento adecuado a estos problemas. Él médico me inspeccionó y me preguntó algunas cosas para saber los antecedentes de mi sobrepeso, sí he tenido asma y dejé de hacer ejercicio vivía en una burbuja dentro de casa cada que una crisis me aquejaba, después la adolescencia y la desaparición del asma pero la aparición del sedentarismo y la “webonada”, luego dejar de comer por días y atascarme otros, mi mala alimentación estaba pasando sus cuentas.

Para enero de 2006 pesaba ya 118 kilogramos y con mi estatura de 1.63m era indescriptible, a pesar de que llevaba una vida “normal” las cuentas comenzaban a pagarse, un disco en la espalda que no servía problemas estomacales diarios pero por sobre todo el mal genio que me cargaba por no sentirme a gusto conmigo misma. “Te opero” dijo el Doctor muy seguro, no dijo más, simplemente comentó muy por encima sobre la operación de Banda Gástrica en aquel entonces apenas se comenzaban a poner en boga estas cirugías baríatricas.

Así fue como sin pensarlo y sin preguntar sobre los pros y contras de la operación esperé a que se hicieran algunos arreglos con el seguro y metí un aparato francés en mi cuerpo la Midband Gastric Band Carrier.

¿Qué es y cómo funciona?
La banda gástrica laparoscópica es un método moderno, seguro y efectivo como método de reducción de peso. La banda se coloca alrededor del estómago disminuyendo su tamaño funcional y vaciamiento, lo que nos obliga a ingerir menos alimentos.



Para observar cómo funciona, aquí está un video.

La cirugía es muy sencilla, vía laparoscopía, sin embargo te enfrentas a una sórdida realidad una vez que te dan de alta. Al llegar a casa por dos semanas solo podía tomar líquidos y papillas las siguientes 3 semanas. Mi estómago en definitiva se sentía diferente, era como si estuviera dentro de una plancha de acero ejerciendo presión todos los días, sin embargo fue un dolor al que tuve que acostumbrarme hasta el día de hoy. Recuerdo que a los dos o tres días de llegar a casa y harta del agua decidí -¿por qué no?- hacerme una quesadilla de tortilla de harina con jamoncito y queso. ¿El resultado? Sentí un dolor a la altura de la boca del estómago y que llegaba hasta la espalda. No pude más que ir al baño y vomitar lo que comí en una mordida para liberarme del dolor.

Se acabó la frustración y llegó la renovación
Todo iba muy bien, de febrero a diciembre de 2006 perdí 18 kilos, pero comencé a estancarme, no bajaba ni pasaba la barrera de los 100 kg, el doctor solo decía “vas muy bien, en diciembre del próximo año estarás flaquísima”, mi sorpresa siempre era que diciembre llegaba y yo seguía sin bajar la barrera de los 100 y fue la primera vez que me sentí frustrada. A pesar de que el doctor me “ajustaba” como comúnmente se dice cuando te inyectan líquido en la banda para apretarla e impedir todavía más el paso de comida, mi cuerpo NO se sentía diferente, ya no sentía la presión al comer los alimentos y casi podía “comer normalmente” pasaron los meses y yo me di por vencida y aprendí a vivir nuevamente con mis 100 kg. comía, bebía lo que quería y “disque” hacia ejercicio.

El tiempo pasó y en 2008 entré a trabajar a un lugar en donde conocí a una Lulú, una enfermera que fue clave en esta transformación. Platiqué con ella sobre mi frustración y le comenté que según mi punto de vista la operación no había dado resultado y que tendría que vivir con el “alien” la banda dentro de mi cuerpo toda la vida sin que funcionara. Ella muy sabiamente me preguntó si había buscado una segunda opinión, ¡claro! jamás pedí una segunda opinión.

Me recomendó con un Doctor con el que ella había trabajado Edgar Hernández especialista en cirugía bariátrica, sin pensarlo pedí una cita. El primer paso fue saber si mi banda seguía en funcionamiento a través de una fluoroscopia. En efecto, mi banda seguía en funcionamiento pero, sí, siempre existe un pero. El puerto de la banda por donde debe entrar el líquido para ajustar la banda estaba al revés y la banda estaba vacía, el primer doctor nunca me ajustó la banda por eso jamás sentí la diferencia.

Segunda operación para acomodar el puerto
Me sometí a una segunda operación, esta vez solo intramuscular, en agosto del 2009 para arreglar el puerto. Y sinceramente creo que no estaba preparada para el proceso que estaba por venir.

El Doctor Edgar me advirtió que yo no había pasado por lo que “vive realmente” un paciente de banda. La operación para arreglar el puerto fue un jueves y al domingo yo ya había regresado al hospital, la banda había quedado tan apretada que no me pasaba nada de líquido y me estaba deshidratando, después de que me entubaron un par de días salí nuevamente del hospital con medio centímetro menos y aún así el líquido no pasaba. Duré un par de semanas sin comer nada, dormía casi todo el tiempo, recuerdo que cuando la gente de la Ciudad de México se congregó en el monumento a la Revolución para bailar en homenaje a Michael Jackson yo dormí de viernes a domingo. Y es que, mi cuerpo se consumía solo.

Algunos Pros y Contras
Los atorones. Un atorón es cuando no masticas bien la comida y se queda atorada en el paso de la banda gástrica el dolor, es indescriptible, solo quieres vomitar pero no vomitas nada, el estómago se siente como una olla exprés a punto de aventar el botón y a veces no puedes ni pararte.

El Agua. El agua simple no pasa. En cuanto la bebo se atora y la vomito. Es lo que más extraño. Una amiga bióloga me dijo que se debe a la densidad del agua. Sin embargo el agua fría con clight de horchata me pasa increíblemente bien.

El horario de comidas. La banda se abre comúnmente a medio día, hay días que he querido desayunar y que simplemente si como algo ¿adivinen? Sí, lo vomito. Así que me acostumbre a comer únicamente por las tardes que es cuando la banda se abre.

Le energía. Vivo con vitaminas y cada dos meses me inyecto Bedoyecta Tri, la presión me baja cada dos o tres semanas y lo sé porque mi cuerpo se enfría a pesar de estar a 31º C en la calle.

La agilidad. Mejoró porque mi cuerpo se deshizo de 58 kilos, la espalda ha dejado de dolerme y puedo caminar mucho más tiempo sin cansarme.

La ropa. Obviamente la ropa ya puedo comprarla talla mediana y a ojímetro aunque todas las semanas desecho algo que ya no me queda porque mi cuerpo sigue bajando de peso.

La familia y la sociedad después de la banda gástrica.
Este tema en particular es algo difícil, muchos de ellos no comprenden que este procedimiento no es que NO QUIERAS COMER, es que físicamente NO PUEDES COMER. De pronto, todos quieren verte ingerir la misma cantidad que ellos y llega la esperada pregunta de ¿Comes súper poquito? ¿No quieres otro taquito? (muy común en México).

Todo el mundo en un principio se preocupa y es claro, te ven comer poco, te ven desganada, durmiendo casi todo el día y hay veces que al menos mis papás querían meterme al quirófano para quitarme la banda al verme en el suelo por los dolores que los atorones me causan.

Pero poco a poco la familia comienza a adaptarse a los cambios y sabe que cuando vas al baño es porque tienes una urgencia por liberar algún bocado que no masticaste bien, es como vivir con una enferma de bulimia que es aceptada por todos, pero esto es diferente. No se trata de vomitar cada que se puede, simplemente es masticar pausada y tranquilamente para evitar este tipo de trastornos y es muy importante evitar infecciones gastrointestinales porque nos deshidratan rápidamente.

He aprendido que cada paciente de banda es diferente, actualmente peso 60 kilos he terminado con el tratamiento de ajustes y desajustes de banda, de baja presión, de cansancio, de frio, de mal comer y mal hidratarme.

Hoy me han quitado un centímetro de ajuste y puedo beber líquidos como loca. Mañana mismo tengo cita con la nutrióloga ya que como les conté esto no es magia y hay que seguir cuidándose. Mi doctor dice que si no me cuido se puede subir un promedio de 10 kilos en mes y medio y después de tanto sufrir es lo que menos quiero.

Cada paciente de banda es diferente y cada uno debemos acomodarnos y aprender a vivir con la banda y con lo que la gente diga, porque finalmente buena o mala fue una decisión de vida que hay que afrontar con la frente muy en alto.

¿Algo más? Ah sí… ¿quieren ver mi transformación?


Tuesday, May 3, 2011

Un año más y...

Un año más y mis pensamientos han vuelto a florecer, más lindos que nunca.



Un simple reflejo de mi vida hoy.

Monday, May 2, 2011

En busca del unicornio perdido.

En mis ánimos por regresar a la fotografía, decidí ingresar a dos talleres para sensibilizar esa parte de mis talentos que ha estado un tanto dormida. En busca de este despertar me inscribí al Taller de procesos creativos para generar proyectos fotográficos impartido por Cannon Bernaldéz en Photo Linterna Mágica

El curso y las prácticas que hasta hoy hemos hecho me han servido para pensar y reflexionar más las tomas a partir de un concepto y no andar por la vida disparando y gastando negativo sin nada más que ofrecer. Así, no dudé en inscribirme a la ruta estenopeica que el taller ofreció este fin de semana en el Museo Archivo de la Fotografía de la Ciudad de México, mismo que lleva por nombre; "En busca del unicornio perdido".

Al llegar nos esperaba una cámara oscura que además de llevarnos atrás en el tiempo allá dónde los pintores usaban este tipo de cuartos para pintar sus grandes cuadros pude observar lo que un cuarto y un agujero o "estenopo" es capaz de hacer.

Desde el Facebook de Cannon les comparto la foto de la cámara oscura.


Después de haber experimentado esto, entiendo mucho más el trabajo de Abelardo Morel con un Manhattan más detallado que la Catedral misma, sin embargo, trabajan el mismo concepto.


Y en seguida, salimos en busca del unicornio perdido en medio de una de las junglas de asfalto más caóticas del mundo. Realicé dos tomas y no fue sino hasta que entramos al cuarto obscuro que pude ver los resultados.

El negativo de la segunda toma:


El positivo de la primera toma que fue la mejorcita, aunque no es del todo buena.

Ahora sé que tengo una cámara estenopeica con un lente gran angular y que podré revelar e imprimir en casa sin necesidad de una ampliadora. Confieso que me comen las ansias por hacer más experimentos con mi nueva cámara.

Saturday, April 30, 2011

Niños

¡Feliz día del niño!

Les desea con cariño, mi amiga, mi niña interna, mi reflejo, mi niñez. Yo.

Tuesday, April 26, 2011

Encontrando el camino

"Lee la introducción y encontrarás el camino" me dijo
Sandra Cisneros en febrero de este año durante la 6ta Conferencia Internacional de Escritores en San Miguel de Allende a la cuál acudí gracias a una beca, otorgada por Universia.

Las palabras de esta escritora chicana autora de La Casa en Mango Street estuvieron guardados en mi memoria por un largo rato. Tengo tantos libros por leer que su libro, aquél que adquirí en la conferencia había estado esperándome desde aquél entonces en mi librero. Ayer a las 2.30 am terminé de leer a Murakami y hoy me tocaba elegir un libro nuevo, miré hacia la pila de libros "en espera" y fue este librito de pasta suave color verde con una casa naranja dibujada como portada que me llamó nuevamente.

Estaba tumbada en mi cama leyendo. La introducción es muy ligera, tanto que mis dedos se posicionaban rápidamente al final de cada página para dar la vuelta antes de que mis ojos pudieran terminar la última línea. Ella lo dice: hoy en día la gente esta tan ocupada trabajando que merece "cuentitos hermosos" porque no disponen de mucho tiempo y a menudo se sienten cansados y así simplemente se imagina un libro que pueda abrirse en cualquier página y aún mantenga el sentido para un lector que no sepa que sucedió antes o qué viene después.

Con la simple introducción me ha atrapado. La oración que me dijo aquella tarde en la mágica ciudad colonial de San Miguel de Allende retumbó cuando terminé de leer la introducción y recordé:

-Me gusta escribir cuentos infantiles, le dije.
Ella sonrió, "lee la introducción y poco a poco encontrarás el camino".

Y así fue, no solo para escribir "cuentitos hermosos" como ella los llama, sino para darme cuenta que ella también fue una rebelde, que enfrentó sus miedos en pro de la superación, me sentí tan identificada cuando cuenta que su padre quien quería verla casada y con hijos, ella dice que no es tiempo que quizá después pero hay tantas otras cosas en la vida que tiene que hacer primero; viajar por ejemplo, aprender a bailar tango, publicar un libro, vivir en otras ciudades, ganarse una beca, ver la aurora boreal entre tantos sueños más.

Hoy, sentada frente a esta computadora en mi cuarto rodeada de corazones de latón, hadas, cámaras, fotografías, cuadros, discos y películas me siento confiada, confiada de que he logrado llegar a un punto clave en mi vida, de que día a día me superaré a mi misma y es que en verdad nunca pensé que el camino me llevará tan lejos. He escrito pocas cosas, nada serio ni en forma (además de este blog) y la crónica sobre el terremoto de Chiile que me ayudo a tallerear mi amiga y poeta Claudia Posadas publicado en una página web. Sí, lo sé trabajo en una redacción para una revista del ramo turístico y he hecho cosas interesantes pero nada que pueda llamarse "obra" para publicarse en un libro de "pasta dura" como diría Cisneros.

Por otro lado, tampoco hago menos lo que ya he hecho. En el taller que ofreció Mónica Lavín, escritora mexicana y autora de Yo la peor, el primer capítulo de Romina recibió muy buenas críticas. "Me parece que es un muy buen primer capítulo". Sí, el Premio Iberoamericano de Novela Elena Poniatowska dijo eso sobre mi capítulo. ¡Qué orgullosa me sentí!

En cuanto a cuentos infantiles, bueno, creo que el periodo en el que mi corazón escurría sentimiento fue la clave para escribir El Dragón que se comía los cumpleaños, y aunque la persona a la que le escribí aquel cuento que me llevó noches enteras de insomnio y desvelo no dijo ni una sola palabra, muchas otras que lo leyeron no dudaron en decir que el cuento era muy bueno.

En esta vorágine de sensaciones y sentimientos, he llegado a la conclusión que debo seguir escribiendo.

Gracias Sandra, porque esa introducción, sin duda me mostró el camino.

Monday, April 25, 2011

Atravesando.

De pronto miré atrás y muchas cosas llegaron a su fin. La mayoría de ellas sin darme cuenta, otras tantas con precisos e indoloros finales.

No sé si el destino me fue preparando, -yo creo que sí-, no fue una coincidencia que justo cuando llegué al climax del ahora uno de mis libros favoritos; “El fin del mundo y un despiadado país de las maravillas” ahí donde se comenzaba a hablar de un sentimiento de perdida, yo misma estuviera experimentando ese sentimiento a flor de piel.

Inconscientemente comencé a desligarme de todo a lo que estaba apegada, sobre todo a mi trabajo y a mis amigos ...los nuevos amores… bueno, sí, también un poco, yo misma sabía que no durarían mucho son amores pasajeros, extranjeros, muy bonitos y perfectos para ser duraderos.

Comenzaré con el Cuento de Hadas ruso, de esos hombres cuasi perfectos que llegan a tu vida. Sin esperarlo apareció un alto caballero con acento extranjero que incitaría a cualquiera a pedir una, dos hasta tres botellas de vodka como lo hacía en los buenos viejos tiempos. Me sentí la mismísima Anastasia Nikoláyevna Románova, -recuerdo de una princesa perdida en la memoria histórica mundial-, sus besos me hicieron olvidar gran parte de la crisis existencial de meses pasados. En definitiva él no llegó para quedarse, al contrario, llegó para darme una prueba fehaciente de que lograré obtener lo que deseo y que finalmente llegará a mi vida el hombre que quiero y que necesito, mientras tanto, esta historia se terminó. En algún momento supuse que habría una despedida y no la hubo, cuando me di cuenta su estado en el mensajero marcaba “in Singapore”.

Y es que no se puede lidiar con miles de kilómetros interpuestos, como dije, al final no hubo despedida. Se fue sin avisar. ¡Muy bien hecho! porque de haber sucedido lo contrario seguramente después de la magistral despedida hubiera llorado por días.

Poco después y con el ruso a ya del otro lado del mundo, en una ciudad más cercana; la nuestra, mi trabajo como relacionista pública también llegó a su fin aunque debo aceptar que el finiquito de este fue un proceso más difícil que el del "amor".

Decir adiós a mi trabajo no solo significo ver por mi futuro y retomar mi carrera en una redacción, cosa que extrañaba a montones, también representó el triste adiós con esa nueva familia laboral que había formado, a mi jefa que más que jefa es una gran amiga, a mis compañeros con los que viví más de un año compartiendo experiencias y momentos gratos y aunque sé que los veré nuevamente porque esa amistad sigue en pie, el hecho de no verlos diario me causaba un gran conflicto. No fue hasta que abracé a mi amigo Erick el miércoles pasado para despedirme -el último día- que me dí cuenta de lo mucho que los extrañaría.

Hoy lunes 25 de abril después de unas anheladas vacaciones me doy cuenta que soy libre, que emprendo nuevamente el andar con más estrellas a mi espalda (mis amigos, compañeros, amores, experiencias, logros y sueños). Leía por ahí que: "no es fácil decir adiós. Sin embargo, nos hemos de despedir para seguir adelante, para dar la bienvenida a una nueva vida, una vida sin ese alguien que tanto significó para nosotros", me doy cuenta que atravesar por ese sentimiento de perdida es mucho más fácil si te dejas guiar por esas pequeñas y a veces imperceptibles señales que te da la vida.

Hoy atravesé el espejo.

Friday, April 1, 2011

Tus pies

Soñé con tus pies.

¿Cómo?

No sé, ni siquiera los conozco aún después de tanto tiempo de conocernos, de amarte tanto y de no comprender qué fue lo que paso.

Sin embargo, tus pies me han dejado la curiosidad de investigar su significado. Esto fue lo que encontré.

Soñar con pies, significa que su vida va a cambiar por completo (un viaje, cambio de ciudad, el trabajo etc...)
Soñar que mira unos pies que no son los suyos, significa que mantendrá sus derechos y que sabrá hacerse un lugar en el mundo, en el bando que Vd. se merece.


En definitiva, mi vida estará llena de cambios las próximas semanas y por supuesto mantener mis derechos me hará conservar el lugar en el mundo que me he ganado.

Puedo decirte que en definitiva me gustó soñar con tus pies, reírnos, mirarnos como si el tiempo se hubiera congelado y nada hubiera pasado.

Para ser sincera; lo que más voy a extrañar de este lugar es a ti.

Monday, February 14, 2011

Día Internacional del Niño con Cáncer. Reflexiona, Genera y Difunde.

Hace poco más de un año, conocí a profundidad la labor que Casa de la Amistad para Niños con Cáncer I.A.P. lleva a cabo. Hoy 15 de febrero se celebra el Día Internacional del Niño con Cáncer, por lo que estamos invitando a los medios de comunicación y a la comunidad en general a sumarse a un esfuerzo conjunto para conmemorar este día con la intención de sensibilizar a la sociedad y sumarla a la atención de esta grave enfermedad.

El Sr. Pedro Ferriz de Con, Embajador de Buena Voluntad de Casa de la Amistad para Niños con Cáncer, I.A.P. y Cinemex se han sumado ya a este gran esfuerzo. Durante un mes se proyectará un Cineminuto Institucional en los complejos cinematográficos del Distrito Federal y en el Interior de la República Mexicana donde Casa de la Amistad tiene presencia a través de sus Bancos de Medicamentos.

Por ello, así como grandes personalidades y empresas se han sumado a la noble labor de Casa de la Amistad para Niños con Cáncer I.A.P., invitamos a los medios de comunicación y la sociedad en su conjunto en esta próxima fecha a dedicar una mención, una reflexión, o a enviar un comunicado a sus seguidores y contactos vía Twitter y Facebook sobre este creciente problema de salud que en nuestro país representa la segunda causa de muerte entre el segmento poblacional conformado por niños de meses hasta los 18 años.

Como parte de la Misión de Casa de la Amistad: “Brindar apoyo integral a niños y jóvenes de escasos recursos que padecen cáncer en México”, también mantenemos el firme propósito de informar y sensibilizar a la sociedad en su conjunto en relación al objeto social que nos compete. Ello en beneficio de la atención adecuada y pronta de todo aquel niño y joven que independientemente a su circunstancia socioeconómica se vea en la necesidad de enfrentar al cáncer. Fieles a los preceptos que competen a los derechos humanos inalienables de la infancia, dicha tarea puede y debe ser labor de todos.

A la fecha, orgullosamente Casa de la Amistad se encuentra ofreciendo apoyo integral a más de 2,700 niños y jóvenes que padecen esta grave pero curable enfermedad. Sin embargo, en este momento, Casa de la Amistad tiene que dar pronta respuesta a una lista de espera de niños y jóvenes que de manera urgente necesitan del tratamiento adecuado para sobrevivir al cáncer. Es por ello que nos es preciso redoblar esfuerzos de procuración.

¿Sabías que existen muchas más formas de ayudar más allá de la donación monetaria?
Visita www.casadelaamistad.org.mx y conoce las opciones del cómo aportar y ayudar.

Yo en lo personal, contribuyo difundiendo su mensaje y visitando regularmente la tienda de "Regalos con Causa" mi sobrina ha sido verdaderamente feliz con los juguetes que ahí he comprado.

¡Súmate!

Monday, February 7, 2011

De sueños; un reencuentro y la receta.


Caminaba de subida por un tramo de terrecería, solo podía ver un camino árido, con aquella tierra que no ha sido tocada por el agua de lluvia en meses.

Terminé la que parecía ser una subida infinita. Al llegar a la planicie me encontré con un paisaje totalmente diferente. Era un espacio cuadrado, de cada uno de sus cuatro lados caían pequeñas cascadas de agua de no más de 80 centímetros de altura que adornaban aquel árido paisaje. El agua caía sobre algunas piedras decoradas, también, de forma cuadrada que parecían piezas de cerámica con diferentes motivos y dibujadas a mano, junto a caracoles finamente decorados.

Mi maestra, una mujer canosa que vestía un vestido largo hasta los tobillos, de terciopelo negro y cuello de encaje blanco se acerco a mí, me mostró lo que ella llamó "piedras potenciadoras", -¡te servirán! haz buen uso de ellas- me dijo, señalándome dos piedras con algunas parejas dibujadas. -Las hadas las han pintado especialmente para ti- finalizó. Las tomé y las guardé junto con algunos caracoles con patrones varios en una canasta de mimbre.

Mi grupo, de aproximadamente 10 chicos, elegidos para ser llevado hasta ese lugar, se reunió y volvió por aquél árido camino por donde habíamos subido en un principio. Nos dejaron en una tienda de aspecto inglés. Mientras esperaba sentada en una banca de madera dentro del aquel lugar, observé las piedras de cerca, efectivamente eran parejas dibujadas y parecían amarse.

Quité la mirada de las piedras justo cuando un joven pasaba delante de mí, vestía jeans, camisa y un saco de pana café, tenía el pelo largo y castaño. Tomé las piedras fuertemente y pensé que aquel chico era muy guapo, en ese momento él salió por las puertas de cristal de aquella tienda.

Me quedé observándolo. El se detuvo. Dudó un momento y volvió a entrar.

Dirigió sus pasos hacía mí y sin decir una palabra me extendió su mano con un pequeño papel.

Yo lo recibí. Lo miré fijamente y reconocí perfectamente esa cara con barba un tanto descuidada. Dio la media vuelta y salió de la tienda.

Por un momento quedé inmóvil con la mano extendida y un papel en mi mano. Al reaccionar abrí ese pequeño papel. Era una receta, receta que debía seguir para arreglar algunos "asuntos pendientes".

Thursday, February 3, 2011

¡Feliz año! (ahora del conejo)


Solo paso a desearles un excelente inicio de año chino.

¡Es el año del conejo! entonces... ¡A vomitar conejitos!



Lo más importante: Sean felices.

Y universo.. mi propósito este año es: ¡¡un novio!! :)

Friday, January 28, 2011

Mapa de sueños.

Desde que comenzó el año he estado trabajando en un mapa de sueños que no he terminado, quisiera muchas cosas y a su vez quiero pensar bien qué es lo que pido y por qué lo estoy pidiendo. No quería pedir a lo pendejo.

Poco a poco se han cumplido algunas cosas y hay destellos y movimientos de otras. Lo cual me está gustando muchísimo, esas pequeñas metas que tienes en la cabeza debes hacerlas tangibles y moverte por el universo para activar las energías que son necesarias para lograr lo que quieres.

Haz 21 cosas que te lleven a lograr esa meta por pequeña que sea. Gracias a este mapa de sueños he comprobado que es un hecho que si te quedas sentado las cosas NO llegan.

¿Cómo hacer un mapa de sueños? Acá un pequeño tutorial ;)

Espero les sirva.


Monday, January 10, 2011

Post nostalgico número 300


Llegué a un punto al que no creí nunca llegar. Mi actitud y lejanía, sé que te han de parecer un tanto extrañas y es obvio, corté de tajo un hilo: no quiero hablarte, no quiero tenerte cerca, no quiero ni vertse. Lo cierto es que debo decir que tú no tienes la culpa de lo que sienta, de lo que quiera y mucho menos mereces el trato que estoy dando, se me congeló el corazón en aquella nevada “niuyorkina”.

Quebrar algo que sentía y usar la criogenia como método, fue para mí lo más fácil y es que no podía hacer más, después de haber expuesto tanto el corazón, el cuál debo admitir se sentía más vivo que nunca, habló muchas veces conmigo y me ayudo a escribir, a viajar, a dar sin esperar, a cuidar, a procurar y a divertirme.

Viví días increíbles, sentí cosas fascinantes, escribí cuentos impactantes, y no es que no quiera estar contigo en todo momento, pero esta vez no puedo darte lo que no tengo, debo ponerle un punto a parte, avanzar y seguir.

No digo adiós, solo hago tiempo para terminar este asunto, sé que rompí algo, y ojalá rescatemos algo de lo que éramos, de cualquier manera, asumo las consecuencias de vivir mi proceso. Mi proceso de desapego y desenamoramiento de ti.

"Prosigue tu viaje, la vida está esperando por ti.
Que tengas buenos vientos y que a veces te acuerdes de mi.
Y si en alguna tempestad, precisas de un buen puerto
y de bote a cubierto, aquí estaré mirando hacia el mar"

Saturday, January 8, 2011

Preparando Jaibas


Una de las primeras cosas que aprendí a cocinar este año fueron Jaibas. Pasabamos por el supermercado cuando mi padre las vio y se le antojaron. Yo, debo confesar, nunca las había comido y no se me antojaban. Mi madre compro algunas con la esperanza de que mi abuela supiera como hacerlas.
En efecto, mi abuela sabe prepararlas, realmente, el único chiste que tiene es hacer la salsita o caldo como prefieran llamarle, y también debo decir, que el olor era tan rico que no me pude resistir a probarlas.
Acá les va la receta que mi abuela me dio.

Sirve para 10 porciones (jaibas)

Caldo:
8 Jitomates medianos
2 chiles pasilla medianos
1 gajito de ajo
1 pizca de sazonador
sal al gusto

Preparación
Se ponen los jitomates y los chiles en un sarte con poca agua para que hiervan un poquito y se ablanden. Una vez lo suficientemente blandos se licuan junto con el gajito de ajo y un poquito de agua para preparar una especie de salsa.
La salsita que hemos preparado se pone en una cazuela a fuego mediano y se introducen las jaibas, le agregamos el sazonador y la sal.
Por último esperamos a que "suelte el hervor" y tarán... las jaibas estan listas

NOTA: El caldo queda de 10 pero a mi me dio una flojera tremenda comerlas, hay que practicamente chuparles el huesito y sacarle la escasa carne que tienen dentro.

Lo que no me dio hueva fue tomar fotos con una de mis sobrinas, nos divertimos tanto aunque mi abuela se haya enojado con nosotras por jugar con la comida.

La Jaiba


El ataque de la Jaiba


La Sentencia de la Jaiba

Tuesday, January 4, 2011

Soy culpable.


Me declaro culpable. ¡Asesiné al amor!

El amor y yo eramos uno, vivíamos al unísono por las calles de esta ciudad. Embelesada, fui dandole lo que me pedía, en momentos recibía detalles, sensaciones y sentimientos que iban alimentando el alma de cada uno.

Un buen día, el amor se volvió conformista y egoísta, quiso para él todo lo que yo podía darle, sin otorgar nada a cambio. Fue entonces cuando decidí matarlo.

Lo seduje hasta el final y lo invité a un viaje. Volaríamos hasta la "gran manzana", ahí lo mataría y huiría. Tendría el tiempo suficiente. Así que cuando se descubrieran las reminicencias del cuerpo de aquel amor, sería muy tarde como para atraparme.

Era el medio día del 25 de diciembre, con una temperatura de -8° lo lleve de la mano por los marcados caminos de Central Park. Llegamos a Strawberry Fields y lo senté en aquella banca de madera en donde el viento era tan fuerte que congelaba el cuerpo. Le invité un café, él aceptó. -¿Dos de azúcar?-, él asintió, -No tardo, le dije.

El amor, confiado, sabía que no lo abandonaría y que regresaría por él. Egoísta esperó su café por horas, nunca imagino que algo malo me hubiera pasado, en cambio del egoísta amor solo obtuve gritos maldiciendome pensando en dónde podría haberme metido. ¡Tengo frío! gritaba. Y esperó.

Yo salí del país ese mismo día.

Al día siguiente se informó de una espectacular tormenta de nieve, no se había registrado otra igual en décadas. De aquel amor no se supo más nada. El egoísta esperó tanto tiempo tan cómodo en aquella banca, que ahí mismo se congeló y se desvaneció.



Imagen de Victor Eredel